INICIÁTICA

Y es que la carne tiene un Címbalo que repica y se retuerce entre el calor de un solsticio de verano.

Soplan Oboes de viento y compases frenéticos.

Yo miraba tus pies por no caer en la hipnosis que envolvía tu aroma de guayabas y palmerales

Y a pesar de todo
mis ojos no pudieron con su 'karma' de vigías insaciables.

Tu boca fué la trampa preanunciada:
me habías silenciado la pregunta aquella tarde cuando el sol pintaba de dorado
las manos y los pasos...
pero supe la respuesta cuando de pié ante mi sangre
dijiste -Salve, Señora de la noche-

Y la danza iniciática rompió los diques.
abrió los ventanales,
arrojó sobre la cama
los restos del naufragio.
La Sonaja.

5 comentarios:

  1. Que dulce sabor el de los Oboes a destiempo...

    Que bueno verte otra vez por estos pagos, amiga Icaria...

    besos!!!

    ResponderEliminar
  2. de veras que el tiempo de los Oboes es el invierno, verdad?

    ResponderEliminar
  3. mmmm olor a guayabas... en isla de pascua comí algunas... muy ricas y sabrosas :D
    Cariños madre! cuidese

    ResponderEliminar
  4. HOLA, HIJA MIA...NUNCA PROBÉ GUAYABAS, PERO EN MIS SENTIDOS ESTÁN... CUIDESEME, POETA DE MEDIANOCHE!

    ResponderEliminar