tal cual los desiertos sin mirajes.
Hasta la llegada de una boca hinchada de besos para la vendimia del destierro.
Sé triste, pues ella te espera en un rincón de este año que pasa.
Está quizá al extremo de tu canción próxima y será bella como la cascada en libertad y rica como la línea ecuatorial.
Sé triste, más triste que la rosa, la bella jaula de nuestras miradas y de las abejas sin experiencia.
La vida es un viaje en paracaídas y no lo que tú quieres creer.
Vamos cayendo, cayendo de nuestro cenit a nuestro nadir y dejamos
el aire manchado de sangre para que se envenenen los que vengan mañana a respirarlo.
Adentro de ti mismo, fuera de ti mismo, caerás del cenit al nadir
porque ése es tu destino, tu miserable destino.
Y mientras de más alto caigas, más alto será el rebote,
más larga tu duración en la memoria de la piedra. Hemos saltado del vientre de nuestra madre
o del borde de una estrella y vamos cayendo.
Y mientras de más alto caigas, más alto será el rebote,
más larga tu duración en la memoria de la piedra. Hemos saltado del vientre de nuestra madre
o del borde de una estrella y vamos cayendo.
*Frag, de PREFACIO de ALTAZOR. Vicente Huidobro.-
A vida não é fácil se não for triste Beijos.
ResponderEliminarNao fácil a Vida, mi querido visitante!!! Seamos tristes pero luchadores incansables... Beijos!!!
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